Almacenar telas de manera adecuada es esencial para preservar su calidad y durabilidad. Ya sea que seas un entusiasta de la costura, un diseñador de moda o simplemente alguien que gusta de tener telas a mano para proyectos creativos, seguir algunas pautas de almacenamiento puede marcar la diferencia en el estado de tus telas a lo largo del tiempo. Acá te presentamos algunas sugerencias para almacenar telas de manera eficiente.
Almacena tus telas en un lugar fresco y oscuro para evitar la exposición excesiva a la luz solar. La luz directa puede desvanecer los colores y debilitar las fibras, lo que afecta la integridad de la tela.
La humedad puede ser perjudicial para las telas, ya que puede provocar moho y deterioro. Guarda tus telas en un lugar seco y, si es posible, utiliza deshumidificadores en entornos más húmedos.
Proporciona una buena ventilación en el área de almacenamiento. Asegúrate de que el aire circule para prevenir posibles olores desagradables y mantener las telas frescas.
En lugar de apilar telas una encima de la otra, almacénalas verticalmente. Esto no solo facilita la identificación de las telas, sino que también evita arrugas innecesarias y reduce la presión sobre las fibras.
Utiliza rellenos entre las telas para evitar que se arruguen y para proporcionar una capa adicional de protección. Puedes utilizar papel de seda o incluso láminas de cartón liviano para este propósito.
Recipientes Transpirables
Si decides almacenar tus telas en contenedores, asegúrate de que sean transpirables. Los contenedores de plástico pueden atrapar la humedad, así que opta por opciones como bolsas de algodón o cajas de cartón.
Etiqueta cada tela con información relevante, como el tipo de tela, fecha de adquisición y proyecto potencial. Esto te ayudará a encontrar lo que necesitas sin tener que desordenar todo.
Considera la rotación de existencias para asegurarte de que las telas más antiguas se utilicen primero. Esto ayuda a evitar que las telas queden olvidadas y se deterioren con el tiempo.
Protege tus telas contra insectos y roedores utilizando productos repelentes o almacenando telas en áreas donde estos no sean un problema.
Limpieza Regular
Realiza limpiezas periódicas para asegurarte de que el área de almacenamiento esté libre de polvo y suciedad. Esto contribuirá a mantener tus telas en óptimas condiciones para futuros proyectos y evitar posibles problemas relacionados con el almacenamiento inadecuado. Recuerda que una buena práctica de almacenamiento no solo preserva la calidad de las telas, sino que también facilita el proceso creativo cuando llega el momento de utilizarlas.